Es mentira que el Mariscal López prolongó la guerra por aferrarse al poder, por egocéntrico y demás cuentos legionarios. Su causa fue la causa nacional. Su único objetivo: la defensa de la soberanÃÂa paraguaya.
Es mentira que la guerra fue contra López y no contra el pueblo paraguayo, pues la prueba de esa falsedad está en la respuesta del Mariscal López, y que no aceptaron los aliados: RENUNCIO A MI CARGO.
La “cuestión uruguaya” que tiene su punto álgido en 1864 implicaba más que una simple cuestión de diferencias políticas que debían resolverse a la fuerza. Venancio Flores fue nada más que una pieza del “tablero de ajedrez” Se debía eliminar los gobiernos nacionalistas de la región. Primero Uruguay y luego Paraguay.
En verdad puede existir duda alguna de este plan? Mitre a poyó a Venancio Flores en alianza con el Imperio del Brasil a cambio de antiguos favores.
Se debía acabar con el gobierno nacionalista del Paraguay, vigente desde su independencia y dar punto final por medio de la fuerza, a las cuestiones pendientes de límites apropiándose de territorio legítimamente paraguayo. Debían traer “la civilización “ al Paraguay.
Cuando se desató el conflicto uruguayo en 1863, Francisco Solano López intentó por todos los medios alcanzar una paz favorable para todos, pero Buenos Aires y el Imperio de Brasil ya se encontraban en alianza y rechazaron todas las tentativas, el plan estaba trazado. A partir de mediados de 1864, la guerra se había vuelto inevitable.
Durante el desarrollo de la guerra contra la Alianza, el Mariscal Francisco Solano López intentó varias veces alcanzar la paz.
Entre los intentos por la paz, el más significativo fue el celebrado en Yatayty Corá en septiembre de 1866.
Según el jefe de Estado Mayor del Ejército Paraguayo, general Francisco Isidoro Resquín, el Mariscal López fue hasta la entrevista con Bartolomé Mitre, comandante en jefe de la Alianza, dispuesto a "renunciar a su cargo si eso anulaba al Tratado de la Triple Alianza".
Otras fuentes mencionan este detalle de la entrevista en Yatayty Corá entre ellos, Gregorio Benítes, Secretario de la Legación Paraguaya en Londres y luego encargado de negocios, en su obra "Primeras Batallas Contra la Triple Alianza". El detalle del diálogo le fue transmitido estando en Europa, mediante la carta de su amigo, el Coronel Paulino Alen, poco tiempo después de la conferencia del 12 de setiembre de 1866. He aquí el fragmento:
GENERAL MITRE.: Agradezco sinceramente las apreciaciones de V.E. Vuelvo a manifestarle que los poderes aliados pondrían fin a la guerra y negociarían la paz con el Paraguay sólamente si V.E. se decidiése a transmitir el mando de la República al Vicepresidente Sánchez, retirándose al exterior.
MARISCAL LOPEZ.: Por mi parte, confieso a V.E. que NO TENDRIA EL MENOR INCONVENIENTE EN RENUNCIAR A MI CARGO COMO PRESIDENTE DE LA REPUBLICA, SI ESTO SIGNIFICA LA GARANTIA DE QUE LAS ESTIPULACIONES DEL “TRATADO SECRETO” QUEDARIAN COMPLETAMENTE ANULADAS Y SIN VALOR ALGUNO PARA CON EL PARAGUAY.
GENERAL MITRE.: Lamento repetir a V.E. que si bien su propuesta es digna de su patriotismo, la paz sólamente será hecha en base a lo estipulado por el Tratado de Alianza.
MARISCAL LOPEZ.: Si eso es así, V.E., le reitero que esas condiciones me las tendrán que imponer solamente cuando haya caído en mi último campo de batalla.
Recopilación y redacción: Carmen J. G. Candia
Fuentes: Drama del 65, la Culpa Mitrista.- Luis Alberto de Herrera
Guerra del Paraguay, las primeras batallas contra la Triple Alianza – Gregorio Benites
La Guerra del Paraguay contra la Triple Alianza- - Francisco Isidoro Resquín
