"Estamos analizando [la situación]. Se han hecho ciertos preparativos para este límite", declaró Peskov ante la prensa.
Además de la UE, el Grupo de los Siete (G7) —club que integran Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, el Reino Unido, Italia y Japón— también
acordó limitar a 60 dólares el precio máximo del barril de petróleo procedente de Rusia.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, al comentar la decisión de la UE y el G7 de imponer un tope global al precio del petróleo ruso transportado por mar, enfatizó que el límite será ajustable, al agregar que esta medida permitirá responder a la evolución de la situación en el mercado.
Las medidas contra Rusia ocasionaron el alza a nivel mundial de los precios del petróleo, el gas y los fertilizantes. En este contexto, los países del G7 propusieron imponer topes a los precios del petróleo ruso para tratar de limitar los ingresos de Moscú tras el alza de los costes de los productos energéticos.