La denuncia fue presentada por la propietaria del local, Lucelia Sánchez Barreto, de 39 años, quien llegó al establecimiento en la madrugada para encontrar la puerta trasera violentada. Al ingresar, se dio cuenta de que el dinero destinado para su negocio había desaparecido. Lo que hace esta situación aún más inquietante es la suposición de Sánchez Barreto de que el autor del robo podría ser un familiar, una hipótesis respaldada por el comisario Catalino Báez.
Báez detalló que, durante la investigación, se encontró una gorra en el lugar del hecho, la cual podría pertenecer a la persona responsable del hurto. Este hallazgo sugiere que el ladrón tenía un conocimiento previo del establecimiento y de la rutina de la propietaria. La posibilidad de que un familiar esté involucrado añade una capa de complejidad emocional al caso, tanto para la víctima como para la comunidad.
Los actos de hurto como este no solo afectan a los propietarios de los negocios, sino que también generan un clima de desconfianza y temor en la comunidad. Los habitantes de Jardín Aurora están ahora más alerta, conscientes de que la seguridad de sus propiedades puede estar amenazada incluso por aquellos en quienes confían.
#pedrojuandigital
@danifiguesti