Según los informes, la incidentada agredió a la víctima antes de despojarla de su pertenencia. En un giro favorable para González, los agentes de la Comisaría Segunda lograron recuperar el teléfono robado durante la detención de Morel Sánchez. Sin embargo, el caso atrajo la atención no solo por el delito en sí, sino también por las circunstancias que rodean a la acusada.
La fiscal de turno, Katia Uemura, dispuso que Morel Sánchez sea trasladada a la Unidad de Salud Mental del Hospital Regional, dado que se sospecha que padece problemas mentales. Esta decisión resalta la importancia de abordar no solo el aspecto delictivo, sino también el contexto de salud de quienes cometen delitos, lo que puede ofrecer un enfoque más humano y rehabilitador.
Este acontecimiento pone de manifiesto la necesidad de redoblar esfuerzos en la seguridad pública, así como en la atención a la salud mental, aspectos que deben ir de la mano en la búsqueda de soluciones integrales para problemas sociales complejos. La devolución del móvil a la víctima y la atención adecuada a la supuesta autora son pasos cruciales en la resolución de este tipo de situaciones.
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@danifiguesti