La intervención se llevó a cabo en la estancia Tenonde, un terreno rural que albergaba aproximadamente 12 hectáreas de marihuana en distintas etapas de crecimiento distribuidas en cinco parcelas. Es significativo mencionar que parte de esta plantación ya se encontraba lista para la cosecha, lo que pone de relieve la magnitud de la operación y el potencial impacto que podría haber tenido en el mercado de drogas.
Bajo la supervisión del Fiscal de la Unidad Especializada de Lucha contra el Narcotráfico, la droga confiscada fue incinerada en el lugar, junto con varios campamentos precarios que contenían enseres utilizados por quienes estaban a cargo del cultivo. Este aspecto del operativo resalta no solo la destrucción de la droga, sino también la desarticulación de las estructuras que permiten su producción.
A pesar de que el operativo no resultó en detenciones, se trata de un claro ejemplo de los esfuerzos del gobierno paraguayo para combatir el narcotráfico en la región de Amambay, que ha sido históricamente conocida por la producción de drogas ilícitas. La acción realizada es un paso significativo en la lucha contra el tráfico de drogas, destacando el compromiso de las autoridades para enfrentar este grave problema social.
Este tipo de operativos son esenciales no solo para la erradicación de cultivos ilegales, sino también para elevar la conciencia pública sobre las consecuencias del narcotráfico y la importancia de la colaboración entre las agencias estatales y la comunidad en la creación de un entorno más seguro.
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@danifiguesti
