El contexto de este llamado es relevante. Juancho Acosta, acompañado por su grupo de seccionaleros, proviene del Movimiento Fuerza Republicana que anteriormente encabezó el expresidente Mario Abdo Benítez, quien además es compadre de Acosta. La política en el Amambay, a menudo marcada por divisiones internas, debe enfrentar el reto de la integración y la colaboración efectiva entre diferentes grupos y líderes para construirse hacia un futuro más sólido.
Cartes, consciente de la existencia de "cartistas" auténticos en la región, como Wilfrido Villanueva y Fernando Esteche, aludió al nuevo dinamismo que representa el diputado independiente Santiago Benítez. La convocatoria a la unidad se extiende más allá de la mera colaboración; es un llamado a dejar de lado las disputas internas que solo pueden debilitar al partido y, por ende, a su capacidad de responder a las necesidades de la población.
Es pertinente abordar también las ambiciones políticas de Acosta, quien tras la muerte del diputado Lalo Gomes busca consolidar su liderazgo entre los exabdidistas y proyectarse como una figura influyente dentro del movimiento Honor Colorado, pero que el presidente del Partido Colorado aun no le dio la bendicion para liderar en el Amambay el Movimiento Honor Colorado.
En conclusión, el llamado de Horacio Cartes a la unidad no solo refleja su visión acerca de la necesidad de un frente común dentro del Partido Colorado, sino que también subraya una lección más amplia sobre la importancia de la cohesión en la política. La fragmentación puede llevar a la ineficacia, mientras que el trabajo conjunto puede maximizar el impacto y contribuir al bienestar de la sociedad. La invitación a "juntarse todos" se erige como un principio fundamental en la construcción de un espacio político que trabaje en beneficio de todos sus integrantes y, por ende, del país entero.
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@danifiguesti
