Las indagaciones iniciales revelaron que guardias de seguridad subcontratados, quienes tenían acceso al patio de vehículos de la Receita Federal, habían aprovechado esta situación para acceder a un compartimento oculto dentro de un automóvil. Este vehículo había sido confiscado por transportar mercancías extranjeras sin la documentación fiscal adecuada y había estado en el depósito durante poco más de un mes. Durante la operación, las autoridades incautaron dos armas de fuego y detuvieron a un individuo por posesión ilegal de un arma.
La operación, que implicó la participación de seis empleados de la Receita Federal, también resultó en la confiscación de teléfonos celulares y otros dispositivos digitales, los cuales serán cruciales para el avance de las investigaciones. La acción es parte de un esfuerzo más amplio que comenzó en noviembre de 2024, cuando se descubrió el desmantelamiento del vehículo. Un informe pericial y la intervención de un perro policía confirmaron la presencia de drogas ilícitas ocultas en la estructura del automóvil, sugiriendo que los vigilantes estaban involucrados en un plan criminal para recuperar el cargamento.
Las autoridades continúan trabajando para desmantelar por completo este esquema delictivo, resaltando la importancia de la colaboración entre la Receita Federal y la Policía Federal en la lucha contra el tráfico de drogas y la corrupción en las instituciones públicas. Esta operación no solo refleja el compromiso de las fuerzas del orden en Brasil, sino también la necesidad de implementar medidas de seguridad más estrictas para prevenir el abuso de poder y proteger la integridad de las operaciones aduaneras.
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